Motivo floral repujado en aluminio

El repujado es una técnica de gran recorrido, desde las creaciones más sencillas hasta las más complejas. Hay incluso plantillas que se venden en tiendas de manualidades para repujar motivos fácilmente. Podemos ir aprendiendo con diseños sencillos y conforme vayamos cogiendo práctica, atrevernos con trabajos más complejos. En esta ocasión os traemos un trabajo interesante aunque es de un nivel elemental, para ir aprendiendo a usar las técnicas básicas del repujado sobre metal.

Podemos comenzar a hacer trabajos de repujado con muy pocas herramientas, luego si vemos que nos gusta podemos ir adquiriendo un repertorio de herramientas suficiente. Para este trabajo nos podremos apañar con objetos que tengamos por casa y que pueden ser utilizados como herramientas de repujar.

Los materiales y herramientas que necesitas son:

• Lámina de aluminio para manualidades
• Lápiz o bolígrafo
• Cartón
• Regla
• Tijeras
• Un trapo de franela o similar
• Un patrón
• Escayola
• Cola

Hay muchos útiles que podemos usar como buriles, un bolígrafo, mangos de pinceles de maquillaje como los de la foto de arriba, mangos de cepillos de dientes, espátulas de manualidades y cualquier cosa que se nos pueda ocurrir. Los buriles de repujado tienen muchísimas formas, el surtido que podemos encontrar en las tiendas de arte y manualidades es muy grande.

Pegamos el papel con el motivo que queremos transferir a la lámina sobre la misma y repasamos el contorno con un lápiz o un bolígrafo.

Repasamos las líneas si queremos marcarlas más y colocamos el trapo bajo la lámina de aluminio, con alguna herramienta de punta redondeada vamos dando profundidad a los pétalos de la flor.

Para perfilar los elementos podemos usar un bolígrafo sin tinta o algún otro objeto puntiagudo, el perfilado se realiza por la parte frontal de la lámina y con ello aumentaremos la definición del dibujo.

Cuando ya tengamos el repujado a nuestro gusto damos la vuelta y preparamos la escayola con agua, vertemos en la parte cóncava de la lámina y dejamos secar. Cuando la escayola haya endurecido y secado bien pasaremos a la fase siguiente.

Colocamos el cartón por encima de la escayola y aplicamos cola en los bordes, doblamos la lámina y pegamos.

Dejamos que seque la cola y a continuación pasaremos al acabado final. Podemos acabar el trabajo con betún, como se puede ver en la primera foto del artículo o usar cualquier pulimento o limpiador de metales. El algodón mágico para metales también es una buena opción.

Aquí vemos el bonito efecto que se consigue con las pinturas para cristal sobre la lámina de aluminio, es otra opción muy interesante. Y así terminaremos nuestro trabajo de repujado, lo tendremos listo para enmarcar y colgar en la pared.

Vía: craftaworld.blogspot.com.es