Estos originales aretes están realizados con cinta de embalaje y sorprenden por su gran parecido con una pluma de verdad. Se trata de crear distintos modelos a vuestro antojo, del color y tamaño que queráis. No lleva mucho tiempo, y con un poco de práctica vais a poder hacer todos los que queráis, para regalar o para llevar puestos en cualquier momento.
Materiales necesarios para hacer estos pendientes:
- Cinta de embalar de colores neón (para este proyecto se ha usado cinta rosa, naranja, verde y azul).
- Un par de alicates con punta de aguja.
- Tijeras.
- Alambre.
- Un lápiz.
- Enganches para pendientes.
Debéis comenzar recortando unos 15 centímetros de cinta de embalaje, doblarla por la mitad y pegarla sobre sí misma. De este modo tendremos un trozo de cinta sobre el que trabajar.
Necesitaréis tener a mano una foto o dibujo impreso con una pluma (una pluma de ave, se entiende) para que sirva de plantilla, ya que tendremos que recortar la tira de plástico siguiendo esta silueta. Para crear el efecto de pelos de pluma lo haréis recortando en diagonal (desde abajo y hacia arriba) en cada lado de la tira. Para haceros una idea de esto que explicamos, no dudéis en guiaros por las imágenes, más ilustrativo.
Ahora bien, en la parte superior de nuestra pluma dejaremos una especie de rabito vertical. Este extremo lo engancharemos al propio gancho del pendiente con un poco de alambre. Si miráis detenidamente las imágenes, veréis que hay que rodear el extremo con alambre y a continuación enganchar al arete.
Por último, os comentamos también que podéis hacer plumas con doble capa (mirad el ejemplo naranja y violeta de la primera foto) superponiendo juntas varias tiras de colores distintos. De este modo conseguiréis unos pendientes mucho más originales.
Vía: brit.co